Una historia de evolución tecnológica y aventuras

Hace unos cuantos lustros, el astronauta Andréi Babkin se embarcaba en una heroica misión para explorar nuevos mundos, a bordo de una nave espacial de quinta generación, equipada con los últimos avances tecnológicos del momento, como unos elevalunas eléctricos y un bonito botón azul para desempañar los cristales. Sin embargo, tras pasar la órbita de Júpiter, su nave espacial sufrió un terrible problema en el carburador y Andréi se ve obligado a aterrizar en un planeta extraño.

Aterriza, por suerte, en un lugar seguro, pero su nave se ve gravemente dañada, con las bujías hechas un desastre por falta de un adecuado mantenimiento, por lo que no puede volver a despegar.

Pasados unos días, aburrido, y sin otra cosa que hacer allí, nuestro experimentado astronauta se embarca en una enigmática misión para explorar este planeta desconocido, al estilo de un nómada digital.

Andréi, aunque estaba muy calentito dentro de su nave, decide salir al exterior. Y nada más asomarse, se encuentra con un paisaje desolador, rodeado de extrañas criaturas y plantas carnívoras. Así que comienza a explorar el planeta, evitando ser devorado, buscando cualquier forma de contactar con su base o reparar su nave.

 

Comienza la exploración de nuevas formas de vida

A medida que avanza en su exploración, sube a una colina, y desde allí arriba se da cuenta de que no está solo. Desde las alturas, visualiza un poblado con estructuras vanguardistas, habitado por una civilización avanzada. Decide bajar a saludar, y se encuentra con que los habitantes de este planeta tienen un talante muy amable y conciliador, e incluso se ofrecen a ayudarle. Andréi se sorprende al descubrir que esta civilización tan avanzada se dedica al comercio electrónico interestelar. Observa como disponen de tiendas online que venden sus productos por toda la galaxia, y su forma de vida está completamente basada en la tecnología.

Nuestro amigo se une a ellos en sus aventuras comerciales, y comienza a aprender los secretos de la venta online y a utilizar la plataforma Prestashop a nivel avanzado. Se siente tan a gusto que se queda aquí durante muchos meses, hasta que se da cuenta de que su habilidad para resolver problemas y su creatividad lo hacen muy valioso para esta civilización.

En su tiempo libre, el astronauta continúa explorando el planeta y aprendiendo más sobre la civilización que lo ha acogido. Participa en charlas, conferencias, e incluso abre su propio canal de televisión sobre comercio electrónico, marketing digital y análisis de datos. A medida que se va familiarizando con la tecnología y las prácticas comerciales del planeta, comienza a desarrollar una habilidad increíble en el uso de Prestashop y sus módulos.

Poco a poco, Andréi comienza a ser visto como un miembro valioso de la comunidad. Los profetas más longevos empiezan a reconocerlo como un líder innovador. Agradecidos por su ayuda incluso llegan condecorarlo con un gomet de color rosado/fucsia al más puro estilo PrestaShop.

A medida que el astronauta se ve como un auténtico experto en comercio electrónico (una eminencia, vamos), comienza a pensar en cómo puede utilizar sus nuevos conocimientos para ayudar a su propio planeta.

Andréi se da cuenta de que en la Tierra están totalmente atrasados en tecnología enfocada al comercio online, incluso hay quien todavía usa Magento. Así que se propone ayudar a su gente a desarrollar una economía basada en todos estos avances, así como en la ecología y comercio justo.

Prestashop Astronauta sobre un planeta

De regreso a la Tierra ayuda a nuestra civilización con PrestaShop

Así pues, nuestro amigo, comienza a crear un plan para implementar estas tecnologías en la Tierra. Y ayudado por unos cuantos mecánicos cubanos y una brida (que como todos sabemos, tiene muchas utilidades), logra reparar su nave para poder emprender el camino de vuelta a casa.

De regreso a la Tierra; concretamente a New York (como no podría ser de otra manera), comparte todos estos conocimientos de comercio electrónico con usuarios de Woocommerce, Magento y Shopify, y éstos quedan absolutamente flipados. En menos de una semana, el astronauta se convierte en un héroe local, hasta el punto de que llegan a derribar la estatua de la libertad para colocar una escultura suya cabalgando sobre un cohete espacial, y llevando en su hombro al pingüinito ese del logo de Prestashop. “Al mas innovador” reza la placa colocada bajo su escultura.

Amado y respetado por todos, el astronauta comienza a sentir una cierta nostalgia por el planeta que lo acogió y las aventuras que vivió allí. De modo que comienza a pensar en volver a visitar ese maravilloso planeta y reencontrarse de nuevo con sus amigos y con toda esa la civilización que lo apoyó.

En su nuevo viaje, decide cambiar algunas piezas de su anticuada nave espacial y equiparla con las últimas tecnologías de Tesla y Starlink. En cuanto lo tuvo todo listo, cogió unas cuantas barritas energéticas y salió zumbando. Al llegar, el astronauta es recibido con alegría y alboroto; todos están hiperespacialmente emocionados al verlo de nuevo.

Tras una cena de gala, mucho más lujosa que cualquier encuentro del foro de Davos (salvo por la ausencia de caviar ruso), nuestro amigo astronauta explica a los lugareños de este planeta perdido, todo lo que ha ayudado a evolucionar el comercio electrónico en la Tierra y lo que ésto ha supuesto en la mejora de la calidad de vida de estas personas y del medio ambiente terrestre.

Finalmente, Andréi se da cuenta de que ha encontrado un hogar en ambos planetas; su corazón está dividido entre dos realidades muy diferentes, y sabe que no podría prescindir de ninguno de estos mundos. Así que decide establecer una base en ambos, viajando entre uno y otro cada cierto tiempo, pero siempre intentando permanecer más de 180 días al año en ese planeta antes desconocido, ya que los impuestos allí son inferiores al 10%, mientras que en la Tierra nunca conseguiría saciar la sed impositiva de ningún país por mucho que lo intentara.

 

Como te puedes inspirar en el éxito de Andréi

Ahora, es feliz; totalmente feliz, ayudando a tantas y tantas personas alrededor de la galaxia, y tributando lo justo y necesario para contribuir a la sociedad, y consiguiendo que además le quede algo para él y su familia.

Ahora, Andréi ya no es un astronauta cualquiera, su rango ha pasado a ser “viajero intergaláctico del código abierto” y ayuda a todo el que lo desee a mejorar su ventas online con el respaldo de PrestaShop. Y no le importa si son hombres o mujeres, si son heteros o bisexuales… Como bien dice nuestro amigo: “La democratización de la tecnología es lo más importante”. Esto sí es democracia.

La historia de nuestro astronauta Andréi, todavía hoy día inspira a muchas personas a seguir su ejemplo y a aprovechar las oportunidades del eCommerce para mejorar sus vidas y las de sus familias.

En este momento, Andréi lleva años retirado de la vida pública. Hay quien dice que está de viaje con su autocaravana por Portugal, otros especulan con su fallecimiento, e incluso hay quien dice haberlo visto en la isla de Sumba, muy cerca de Bali, pero su legado sigue vivo, muy vivo. Tan vivo que puedes comenzar ahora mismo a crear tu tienda online PrestaShop y continuar haciendo historia.

¡No pierdas la oportunidad de mejorar tu vida y la de tu familia! ¡Contacta hoy mismo con el equipo del astronauta Andréi (puedes enviar un WhatsApp al 664 452 170) y comenzar hoy mismo tu viaje hacia el éxito en el comercio electrónico de la mano de PrestaShop!

P.D.: Si te ha gustado este loco relato de ficción, compártelo en tus redes, así me ayudas a seguir escribiendo más ideas locas.